!Esos locos bajitos!

...Que dicen ser mis niños.
Hace ya 18 meses que los conozco, y la primera impresión no fue nada buena. Allí estaban ellos, 8 pequeños desafiantes, 4 años recien cumplidos, con mofletes sucios y ropas raídas, mirándome recelosos, nerviosos y enfadados; !Esta no era la profe que ellos esperaban!, y al otro lado, estaba yo, la paya nueva, asustada, muy asustada, solo eran 8, pero contra uno, y sin tener ni idea de que hacer con ellos. mis múltiples y variados recursos fueron cayendo en picado, uno tras otro, y pensé ¿qué ..... pinto aquí?. Se escapaban, se escondían, se subían a la casita, voces por aquí, voces por allá, peleas,...en una palabra: se REÍAN de mi.
Los recreos eran aún peor, porque a la banda de los carrillos sucios se unían otra docena de pequeños "mosquetanos", y vuelta a empezar, ponte bien , estate quieto, no pegues, no tires arena, no eches cáncer, no, no, noooo,...Cuando llegaban las 2, parecía haber salido de un campo de batalla.
Fueron días duros, uno si y otro también. La frase mas utilizada por mi también novata compañera , en estos trances, y yo era !HOY CONCURSO!.
En este caos fueron pasando los días y meses de ese primer trimestre del año 2008, que parecía no tener fin. Hasta que un buen día descubrí que lo que mas llamaba su atención, de todo aquello que yo hacía, eran las canciones, y ahí esta la "gelen", canta que te canta, mis compis de IKEA decían que mi clase parecía un musical, !pobre de mi si un día amanecía afónica!.
A través de la música pude organizar los tiempos y espacios de mi aula. Poco a poco el musical fue dejando paso a la PALABRA, la paz y la unidad, y empecé a tener una medio clase en condiciones.
En la actualidad, ya funcionamos como en cualquier otra aula de Educación Infantil, con el privilegio de trabajar solo con 7 niños, el octavo cambió de cole, en este tiempo he ido adentrándome en la vida gitana y conociendo un poco mas a mis alumnos. He descubierto niños, que en su mayoría viven en una familia desestructurada, con muchas carencias, sobretodo afectivas, con una autoestima muy baja, son super inseguros, y con una gran falta de atención, sin olvidarnos de absentismo que presentan muchos de ellos, y es en estos puntos donde básicamente he desarrollado mi acción educativa, he intentado motivarles, incrementar su autoconfianza, !tú si que puedes!, hacer de la clase un lugar seguro donde se sientan a gusto y lo perciban como algo suyo, fomentar el hábito de venir al cole a pasarlo bien, y por supuesto, lo mas importante darles mucho AMOR. Creo que pasito a pasito lo he ido consiguiendo, y hoy en mi clase se respira sanote, y mis chicos y yo nos queremos un montón y estamos muy a gusto juntos.
Ojalá y este buen ambiente lo pudiera trasladar a todos los momentos de sus vidas, solo así tendría la certeza de que mis alumnos son PLENAMENTE FELICES.
Hasta pronto